¿Puede una licuadora de barra realmente marcar la diferencia en tu día a día?
Si alguna vez has trabajado detrás de una barra o en una cocina profesional, sabes que una buena licuadora no es solo un lujo: es esencial. Puede ser la diferencia entre un cóctel suave y uno lleno de grumos, entre cumplir con los pedidos a tiempo o quedarse atrás. Cuando probamos la Licuadora de barra de Omake, nos hicimos una sola pregunta: ¿Es lo suficientemente potente y confiable para el ritmo de un entorno profesional?

Desde el primer momento, el diseño transmite robustez y eficiencia. Con un tamaño compacto de 245 × 260 × 470 mm y un peso neto de 7 kg, esta licuadora es estable, potente y ocupa poco espacio en la encimera.
Pero lo más impresionante es su motor de 2,2 kW, que permite triturar hielo, frutas congeladas y otros ingredientes densos con facilidad y rapidez. No hay temblores, no hay retrasos: solo resultados rápidos y consistentes.
Funciona con voltaje monofásico de 230V y frecuencia de 50–60 Hz. Viene equipada con un cable de sección 3×1 mm² y protección de 1×16 A, lo cual proporciona seguridad incluso con uso intensivo.
Lo que más destaca es la consistencia del rendimiento. Cada mezcla, cada batido, cada preparación sale exactamente como debe. Esto reduce el estrés del operador y mejora notablemente la experiencia del cliente. ¿Nuestra conclusión? Más que una licuadora, es una herramienta de trabajo confiable.
¿Qué tan importante es una buena gofrera en el servicio de desayunos?
Si trabajas en un hotel, cafetería o food truck, sabes que los desayunos son momentos clave. Y cuando se trata de gofres, no hay lugar para errores: deben estar dorados por fuera y suaves por dentro. Así que al probar la Gofrera de Omake, la pregunta fue clara: ¿Puede garantizar calidad y velocidad incluso en los momentos más exigentes?
Con dimensiones de 225 × 400 × 250 mm y un peso neto de 7 kg, esta gofrera se adapta perfectamente a cualquier espacio profesional. Robusta y de aspecto profesional, está hecha para durar.

Gracias a su potencia de 1,3 kW, alcanza la temperatura ideal rápidamente y la mantiene de manera uniforme, lo cual asegura una cocción perfecta en cada uso. Se alimenta con 230V, tiene un cable de sección 3×1,5 mm² y cuenta con protección de 1×16 A.
El resultado: gofres consistentes, dorados y bien cocidos, sin sorpresas. Ya sean dulces o salados, la Gofrera responde con precisión, incluso cuando hay alta demanda. Fácil de manejar, rápida y efectiva.
Este tipo de equipo no solo eleva la calidad del producto final, sino que también agiliza el flujo de trabajo, liberando tiempo y atención para otros detalles del servicio.
¿Cuál equipo se adapta mejor a tu negocio?
La elección depende del tipo de servicio que ofrezcas. La Licuadora de barra de Omake es ideal para bares, restaurantes y cafeterías que preparan bebidas y mezclas intensivas. Mientras tanto, la Gofrera de Omake es la compañera perfecta para servicios de desayuno o brunch, donde la velocidad y la calidad son esenciales.